Felipe tenía derechos sucesorios en Portugal al ser hijo de Isabel de Portugal, hermano de Juana y tío del rey de ese país.
Entre los Quechuas de Perú un movimiento llamado Taqui Onqoy predecía el regreso de los antiguos dioses que vencerían a los cristianos.
La rebelión de los moriscos estalló en la Navidad de 1568…
Contenido
Los moriscos y la La Liga Santa
América y El Virrey Francisco Álvarez de Toledo
Cambio de la política en Flandes
La Princesa de Éboli y el asesinato de Juan de Escobedo
Los moriscos y la La Liga Santa
En la década de 1560 en España había unos 300.000 moriscos que vivían en condiciones precarias. Practicaban el Islam. Buscaron el apoyo del imperio Otomano y de los estados musulmanes de África. En 1567 Felipe prohibió el uso de la lengua y las tradiciones moriscas. La rebelión estalló en la Navidad de 1568. Era muy peligrosa por los otomanos.
Las tropas de los marqueses de Mondejar y los Vélez hicieron frente a los moriscos, pero estos recibieron armas desde el norte de África y se complicó. En la primavera Juan de Austria dirigió las tropas cristianas. La rebelión fue una guerra brutal que causó miles de muertos. Acabo la guerra con bien para España pero se vio sola.
Murió Solimán el Magnífico en 1566, Pio V fue elegido Papa. Tras la captura de Chipre por los otomanos, Pio V hizo un llamamiento a la cruzada a la que acudieron Felipe y Venecia y formaron La Liga Santa el 25 de mayo de 1571. Las tropas bajo el mando de Juan de Austria partieron desde Mesina hacia el Golfo de Lepanto donde obtuvieron la victoria
América y El Virrey Francisco Álvarez de Toledo
Entre 1560 y 1570 se extendió entre los Quechuas de Perú un movimiento llamado Taqui Onqoy que predecía el regreso de los antiguos dioses que vencerían a los cristianos que llegó a ser una sublevación. El Virrey Francisco Álvarez de Toledo terminó con la rebelión y ejecutó a su líder Tupac Amaru.
Francisco de la Cruz criticaba a los políticos y en 1575 fue detenido por la Inquisición y después de tres años arrestado le quemaron en la hoguera. Fray Luis de León acusó a los colonos de estar cometiendo asesinatos y terminando con los pueblos.
Felipe II no tomó parte en las disputas sobre América, pero estaba informado de todo lo que ocurría. Pero sus leyes progresistas estuvieron encaminadas a la protección de los indígenas. Tanto era así que emitió una ordenanza en la que prohibía nuevas conquistas en América y marcaba los objetivos de la expansión.
Los dominios españoles tenían unas fronteras establecidas que solo los misioneros podían traspasar aunque fuera acompañados de militares.
Cambio de la política en Flandes
En marzo de 1574 Luis de Requesens acabó con el Tribunal de Tumultos, promulgó una amnistía general y abolió el diezmo. Los Tercios se amotinaron en Amberes exigiendo su sueldo. Las tropas en Holanda además desertaron y entregaron la provincia al enemigo.
Requesens murió en 1576. Castilla estaba pagando demasiados impuestos ya. La situación era tan lamentable que Felipe volvió a declarar la bancarrota de su reinado.
El rey decidió sustituir a Requesens con Juan de Austria, pero este en vez de ir a Bruselas fue a Madrid a ver a Felipe II. Quería invadir Inglaterra desde los Países Bajos, casarse con María Estuardo y convertirse en gobernador también de Inglaterra, y así la paz en Europa estaría asegurada, pero el rey no se lo concedió.
Un día después de la llegada de Juan de Austria a Los Países Bajos se produjo un motín de las tropas españolas de Amberes. Los Estados Generales llegaron a un acuerdo de paz con Guillermo de Orange que Juan de Austria tuvo que aceptar.
Los Estados Generales nombraron al archiduque Matías de Austria gobernador General. Felipe protesto ante el emperador, ya que ahora había dos gobernadores. Matías buscó el apoyo de Guillermo y Juan de Austria. El rey Felipe II se fue al Escorial, que había sido convertido recientemente en panteón real de los Habsburgo.
Allí organizó un torneo al estilo medieval. En el verano de 1578 España y el Imperio Otomano firmaron una tregua. El 1 de octubre falleció Juan de Austria aunque antes había nombrado a Alejandro Farnesio gobernador y el rey lo aprobó.
La Princesa de Éboli y el asesinato de Juan de Escobedo
Cuando murió el príncipe de Éboli, Antonio Pérez se convirtió en la cabeza del partido que Éboli había formado. Antonio era el secretario de los asuntos de Italia y era ejercía mucha influencia sobre el rey. Estuvo en contacto con Juan de Austria y con el secretario de este Juan de Escobedo. Este último siempre defendió los planes de Juan de Austria con respecto a Inglaterra.
En enero de 1576 Antonio Pérez denunció al hermano del rey acusándole de traicionarle y querer hacerse con la corona de Inglaterra y de los Países Bajos, aunque el rey no le creyó. Mientras Juan de Austria esperaba que enviaran refuerzos y no acababan de llegar, mandó a Escobedo a Madrid para que contara de primera mano las necesidades que tenían.
Al llegar descubrió que Pérez estaba conspirando contra ellos y además también conspiraba contra Felipe II. En marzo de 1578, antes de que pudiese hacer nada al respecto, Juan de Escobedo fue asesinado.
Es mucho lo que se ha dicho de Ana de Mendoza, la princesa de Éboli. No tuvo relación con el rey, pero se cuenta que si la tuvo con Antonio Pérez. No se puede demostrar que tuviesen una relación amorosa pero si política.
Felipe II ordenó una investigación por la muerte de Escobedo y se lo encargó a Rodrigo Velázquez de Arce. Aunque no creía el rey en la culpabilidad de Pérez, las evidencias le hicieron ver lo contrario. El 28 de julio de 1579 Antonio y la princesa de Éboli fueron detenidos y el Cardenal Granvela se hizo cargo de los Consejos de Italia y Flandes.
Ana de Mendoza pagó muy cara su implicación en el asesinato de Escobedo. En 1579, la Princesa fue encerrada, primero en el Torreón de Pinto y más tarde en la fortaleza de Santorcaz.
Finalmente en 1582 fue trasladada a su Palacio Ducal de Pastrana, donde fallecería once años después atendida por su hija menor Ana de Silva en un régimen similar a lo que hoy se llamaría arresto domiciliario. Tras la fuga de Antonio Pérez a Aragón en 1590, Felipe II mandó poner rejas en puertas y ventanas del Palacio Ducal.
Pérez continuó libre porque poseía documentos confidenciales del rey y se temía que los sacara a la luz. En 1585 se ordenó detenerle pero escapó a Aragón donde las leyes le protegían del rey.
Felipe quería llevarlo a las dependencias de la Inquisición en Zaragoza y juzgarlo. En 1591 los zaragozanos impidieron que le llevaran al palacio de Aljaferia. En el tumulto el virrey de Aragón resultó herido y falleció. Al final el rey mandó un ejército en secreto que entrara en Zaragoza y los disturbios se repitieron y Antonio Pérez logró llegar a Inglaterra.
El 11 de noviembre el ejército del rey entró en Aragón y después en Zaragoza donde no encontró resistencia. Juan de Lanuza, y otros nobles fueron detenidos, sentenciados y ejecutados.
Unión de Portugal a España
Felipe tenía derechos sucesorios en Portugal al ser hijo de Isabel de Portugal, hermano de Juana y tío del rey de ese país. Sebastián el rey de Portugal no mostraba interés por las mujeres sino por los juegos bélicos y los torneos medievales. A veces hasta arriesgaba su vida como en una expedición que hizo en 1574 a África.
Se empeñó en una ocasión por mandar un ejército con los ideales de los cruzados. Se llevó a lo mejor de la nobleza portuguesa y el 4 de agosto en la batalla de Alcazarquivir perdió la vida. Portugal se quedó sin ejército, sin nobles y sin rey.
El otoño de 1578 fue muy trágico para el rey Felipe: murió Sebastián, Juan de Austria, su hijo Fernando y el archiduque Wenceslao otro de sus sobrinos. Felipe II mandó a Cristóbal de Moura para que defendiese sus derechos sucesorios, porque el heredero mas cercano era el tío abuelo del rey que acababa de morir.
Este era el Cardenal Enrique, al que nombraron rey. El que le sucedería sería Felipe, porque el rey era un anciano por lo que su reinado sería breve. Había otro candidato que era el sobrino del nuevo rey, Antonio que era prior de Crato.
Felipe II inició una campaña para ganarse el favor de los portugueses y en 1579 preparó un ejército por si fuera necesaria la invasión. Sesenta galeras españolas e italianas a las órdenes del marqués de Santa Cruz. Esto era mas para disuadir que otra cosa. No quería renunciar a sus derechos.
El 31 de enero de 1580 muere el cardenal sin nombrar a su heredero. Llamó al duque de Alba y el 8 de julio iniciaron la invasión, también con la flota que estaba en Portugal al mando del marqués de Santa Cruz. Ya habían nombrado rey al prior Crato, pero prestaron poca resistencia. El 12 de septiembre nombraron rey de Portugal a Felipe II en Lisboa, como Felipe I.
La Corte estaba en Badajoz durante la guerra y a consecuencia de una epidemia de gripe falleció la reina Ana el 26 de octubre. Él la quería tanto que no se volvió a casar. Tras el luto viajó a Portugal y llamó a las Cortes para que juraran al rey.
En abril de 1581 se confirmó la unión de la península bajo una corona. Nombró al príncipe Diego como heredero. Aseguró la independencia del reino de Portugal al igual que los demás reinos de la Monarquía española.
En el verano de 1582 tras la derrota de los franceses se anexionó las Azores. Ese año murió el duque de Alba y detuvieron a Antonio Pérez terminando así con el grupo de Éboli.
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Datos recogidos de http://www.mcnbiografias.com/app-bio/do/show?key=felipe-ii-rey-de-espanna
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